Freedom

Mar y montaña. Sinuosos senderos y abruptos acantilados. Amigos y bici. Un poco de aventura y… celebración al calor de la hoguera.

El plan que la gente de Basque by Bike nos proponía molaba. Y tras varios meses de espera, sonaba mejor que nunca en nuestros oídos.

Volveríamos a disfrutar las imperfecciones del camino. A respirar la salina brisa del Cantábrico. A disfrutar, de nuevo, de la mirada cómplice de un compañero de rodada. Y dormir al raso, pero tapados por un manto de estrellas. Sensaciones en letargo a las que hacía falta volver a encender la llama.

En Hondarribia, en las faldas del Jaizkibel, encontramos esa chispa. Era un lugar mágico. Quizás nuestras ansias de libertad lo hicieron más especial. O tal vez, el hecho de volver a compartir grandes momentos con la grupeta. Lo que es seguro es que se trata del lugar al que nuestra bici deseaba llevarnos.